Toda persona que haya pensado o este pensando en convertir su alojamiento en una casa o apartamento turístico se ha hecho la misma pregunta. Sobre todo cuando nos referimos a casas rurales, las cuales son generalmente grandes.

El coste oculto: El trabajo

Cuando un propietario se lanza a hacer cálculos, generalmente se decanta al principio por las habitaciones. Tiene su lógica: una habitación se limpia antes, permito que tanto muchos como pocos huéspedes puedan alojarse, y generalmente puedo ganar más dinero por habitación. Además, al tener una rotación mayor. las valoraciones y comentarios llegarán antes.

El problema que existe detrás de esta lógica es la realidad. Cuando empiezan a llegar huéspedes, notas como la cantidad de trabajo aumenta considerablemente. Si como propietario llevas tú la casa y la limpieza, conforme pasen los meses verás como tus energías se desgastan notablemente.

La pregunta en este sentido es: ¿Te sale rentable trabajar más para ganar un poco más, o es mejor trabajar menos y no ganar tanto?

¿Llevas tu la casa? ¿O externalizas la gestión, la limpieza y/o la lavandería a terceros?

Cuando llevas tu casa al 100%, te encargas de las tres patas del negocio: la gestión (llamadas, check-in/check-out, etc.), la limpieza (baños, escaleras, suelo, armarios) y la lavandería (sábanas, toallas...). Si bien te quedas con todo lo que ganas, también harás todo el trabajo.

Y si, además, la casa está configurada como un alojamiento por habitaciones, puedes llegar a la situación en la que no te de tiempo. Si tu situación es la que acabamos de describir, entonces te recomendamos que te pienses dos veces el establecer tu casa como habitaciones. Una casa que se alquile entera te obligará a limpiarla de media una vez a la semana, a la vez que el número de llamadas será menor.

Si por el contrario has conseguido externalizar los servicios de gestión, limpieza y/o lavandería, y sigue siendo rentable tu alojamiento por habitaciones, entonces estas en la situación ideal. No obstante, recomendamos que hagas números, nunca sabes que oportunidades puedes estar perdiendo al alquilarla de manera completa.

El peligro de cambiar de opinión

Cuando te decidas por una modalidad u otra de casa rural, tienes que dar por sentado que esa modalidad va a ser en la que se va a encuadrar tu alojamiento de manera indefinida. Al orientar tu casa hacia una casa por habitaciones, cambiarlo a una casa que se alquile entera puede traer ciertas trabas legales, o hacer obligatorios ciertas comunicaciones con la administración. Además puede ocurrir que, si decides seguir adelante con el cambio de tipo de casa, sea necesario realizar obras en el inmueble. Por lo tanto, una vez elijas casa por habitaciones, casa entera, u otra modalidad, ten en cuenta que el cambio de idea puede dar lugar a auténticos quebraderos de cabeza.

En realidad, ¿Qué funciona mejor?

Si nos fijamos en la rentabilidad por reserva (beneficio por reserva), sin duda alguna gana la casa completa: Mismo gasto de limpieza para un ingreso por reserva superior. Sin embargo, si observamos la rentabilidad absoluta (beneficios totales), veremos que el beneficio de la casa por habitaciones es superior.

El problema al que se enfrentan muchos propietarios de inmuebles rurales es la fatiga y el cansancio que supone llevar la gestión. Si quieres no sufrir tal desgaste ni padecer de cansancio acumulado, recomendamos que te plantees seriamente el alquiler completo. Si aún así te ves fatigado, contáctanos y te quitaremos trabajo en la gestión de tu casa rural.